El pasado sábado en horas de la mañana se desarrolló en el Aula Magna de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco la entrega de certificados a los primeros voluntarios de la Asociación Cuenco de Luz de nuestra ciudad.

Estuvieron presentes representantes de distintas instituciones como el Ingeniero Ricardo Scorolli, delegado zonal de la Delegación Puerto Madryn de la UNPSJB; ; Milagros Badaloni, Subsecretaria de Relaciones Institucionales y Fortalecimiento de las Organizaciones Sociales, de quien remarcaron “el compromiso del Estado Municipal”;  Nélida Taira, fundadora y presidente de  EDDIM; Carolina Garrido de CEPA; Magdalena Escobar, de la Facultad de Enfermería; la Fundación Osde, que envió un saludo; integrantes de APADEA; del Hogar para adultos mayores «Los Paraísos»; la  coordinadora general de la Patagonia de la Fundación Volver a Empezar, Silvia Bentacourt, entre otros.

Momentos antes de la entrega de certificados, se compartió con el público un charla sobre la misión y la visión de la organización, el Dr. Mariano De Muria, coordinador local del proyecto, explicó la filosofía Hospice, haciendo hincapié en el acompañamiento, tanto espiritual como físico del paciente, mediante una acción voluntaria de personas que acompañan al paciente, considerado como huésped, respetando su autonomía, su identidad, historia y preferencias. Realmente un trabajo loable y humanitario, remarcando que esta labor tiene como prioridad el enfoque hacia el sector público y que la metodología de trabajo es interdisciplinaria. Bajo el lema “Prepararnos para acompañar a quien transita el final de la vida nos permite acercarnos para comprender, aliviar en el sufrimiento y crecer uno mismo en la tarea”, De Muria mencionó que la labor en la ciudad es “formar, reclutar y concientizar nuevas voluntades  para este nuevo camino, en esta área a la que nosotros nos dedicamos”, mencionando el camino que todos transitamos como humanos, el cual tiene un final “momento al que todos llegamos; nosotros mismos o los que tenemos alrededor y así como hay especialistas entrenados en recibir gente al mundo tiene que haber gente que acompañe al que se va del mundo, pero esto compromete una esfera de mucho dolor, que no se la ve, se la tapa, y a veces hasta se desprecia, quedando toda la gente involucrada sola en ese momento tan especial”.

Asimismo, manifestó que “la filosofía Hospice, si bien está muy concentrada en Buenos Aires, se está expandiendo en el resto del país; nosotros queremos replicar algo así” a la vez que mostraba fotos de las casas; no son sanatorios, ni instituciones; son casas donde niños y personas mayores y hasta mascotas conviven”.

Cabe destacar que la misión de la organización es brindar acompañamiento, cuidados competentes y compasivos para el alivio del sufrimiento a personas sin recursos con enfermedades progresivas e incurables (oncológicas y no oncológicas) y a sus allegados, en el final de la vida, con el objetivo de poder devolverle a este momento la importancia del respeto por la vida, la dignidad y la sacralidad de ésta en compañía de los seres queridos, en el lugar más confortable y con el menor sufrimiento posible.

Para mayor información, conocer más sobre la misión y participar como voluntario, socio o colaborar: cuencodeluz@hotmail.com Teléfonos: 280 154665846 ó 4471682.

julio cuenco de luz